Proteínas lácteas y sus beneficios para aumentar la masa muscular y el desarrollo de los huesos
La caseína y las proteínas del suero son proteínas de alto valor biológico, y son los componentes más importantes de la leche de vaca, además de muchas vitaminas y minerales.
Cuando se consume con una dieta variada y equilibrada
Cuando se apuesta por una dieta variada y equilibrada, los alimentos ricos en proteína son recomendables y adecuados para todas esas personas que mantienen una vida activa y quieren aumentar su masa muscular, al igual que para aquellas que quieren proteger sus huesos y mantener un desarrollo adecuado de los mismos. En este sentido, las proteínas lácteas se convierten en aliadas perfectas para quienes mantienen estos objetivos.
Los productos lácteos como leche, yogures, quesos, quarks, natillas y batidos proteicos, etc., son cada vez más recomendados por aquellas personas que se marcan un ritmo de vida activo y saludable. Entre los beneficios que presentan todos los compuestos activos que aportan estos lácteos, destaca la protección de los músculos. Uno de los grandes aliados para ese objetivo de aumentar la masa muscular es la proteína láctea.
Proteínas de alto valor biológico
Precisamente, y como mantiene la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), la caseína y la proteína láctea son proteínas de alto valor biológico, y son los componentes más importantes de la leche de vaca. Además de sus beneficios para aumentar masa muscular, los alimentos lácteos ricos en proteína, especialmente los procedentes de la vaca, tienen también un alto contenido de calcio (120 mg. Por 100 ml.), lo que es igualmente favorable para el buen desarrollo de los huesos. La obtención de suficiente calcio y vitamina D en la dieta ayuda a mantener los huesos fuertes y disminuye el riesgo de desarrollar osteoporosis.
La vitamina D ayuda al organismo a absorber el calcio, por eso los alimentos ricos en proteína láctea son recomendables en la dieta porque proporcionan ese calcio y a menudo se complementan con Vitamina D, lo que permite al organismo contar con todo lo necesario para el adecuado desarrollo de su masa ósea.
Por edades, los niños de 9 a 18 años deben obtener 1.300 mg. de calcio al día y 600 UI (unidades internacionales) de Vitamina D. Los adultos menores de 50 años deben obtener 1.000 mg. de calcio y entre 400 y 800 UI de vitamina D al día. Los adultos de 51 años en adelante, deben consumir entre 1.000 y 1.200 mg. de calcio al día y entre 800 y 1.000 UI de vitamina D.